Para obtener el ránking UEFA de países se suman los puntos obtenidos por cada equipo, y luego se dividen entre los clubes de esa liga que hayan participado en competiciones europeas. Un ejemplo ilustrativo: 85 puntos de coeficiente entre los ocho equipos españoles participantes da una media de 10,625 hasta este momento. Las medias de las últimas cinco temporadas determinan después la clasificación actual, en la que España se mantiene primera en estos momentos.

Una forma bastante curiosa, por cierto, la que tiene el máximo organismo europeo de computar los resultados, pues las victorias y los empates de Champions League y Copa de la UEFA valen lo mismo a la hora de configurar la clasificación: sea cual sea la competición, cada equipo obtiene dos puntos por ganar y uno por igualar. Los clubes de Champions, eso sí, arrancan con un bonus de tres puntos por jugar la liguilla de grupos, y logran otro más si acceden a los octavos de final.

Las victorias en las rondas previas de Champions y en la Intertoto suman un punto, y los empates de ambas eliminatorias, medio. Ésa es la razón por la que el Sevilla supera al Barcelona en aportación a la Liga española. Los sevillistas son el equipo de toda Europa que mayor coeficiente agrega al ránking de países.

En el ránking de clubes las cosas cambian. También se computan las últimas cinco temporadas (el Milán es el líder), pero en ese caso no cuentan las rondas previas (clasificación para la liguilla e Intertoto) y después hay que sumar a cada club el 33 por ciento del coeficiente que haya conseguido el campeonato del que procede. De esa manera, el Manchester United superaría al Sevilla en la clasificación de equipos durante esta campaña: los dos clubes han ganado cinco de sus seis encuentros durante la liguilla, pero los nervionenses perdieron el otro mientras los red devils lograban un empate. Inglaterra, además, añade a sus cuatro equipos una ligerísima ventaja, el 33 por ciento de 10,875: 3,625, por 3,542 para los españoles.