La jornada 21 se presentaba con tan sólo un partido adelantado al sábado, el del Sevilla, y llegaba a Nervión uno de los rivales más habituales de los últimos años, el Osasuna de Pamplona. Todo apuntaba a un partido como los de siempre, reñido, de garra y con fuerza. Y nadie se equivocó en su pronóstico.

El partido fue bronco, con polémica y con ese gustillo a rivalidad que se viene creando en los últimos tiempos entorno a los Osasuna-Sevilla y viceversa. La cosa dio para mucho y aún dará en los próximos días, de eso no hay duda. Pero ahora nos paramos a analizar el resto de la jornada en Primera División, no pudo ser más propicia para los intereses sevillistas.

Mientras el equipo de Jiménez se deshacía del de Ziganda, el resto de rivales que están por encima perdieron o al menos no ganaron. Todos salvo el Madrid, que se enfrentaba al Villarreal y le vencía por 3-2. En estas tablas clasificatorias se ve claramente la diferencia que el Sevilla a recortado a los equipos inmediatamente por encima; este es el antes y este el después de la jornada número 21.

Inapelable el paso adelante que han dado los sevillistas que se sitúan ya a tan sólo cuatro puntos de los puestos europeos y a ocho del objetivo marcado al principio de campaña, la Liga de Campeones. Ahora el Sevilla viaja a Huelva para visitar a un Recreativo que se acaba de situar en puestos de descenso después de encadenar seis partidos sin conocer la victoria.

Por su parte, Racing y Español juegan también fuera de casa contra Levante y Getafe respectivamente.